#ElCantarDeMiTierra

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folklore por siempre!

domingo, 31 de enero de 2021

efemérides #undiacomohoy

Nacido un 31 de enero de 1908, Héctor Roberto Chavero -más conocido como Atahualpa Yupanqui-, es considerado el mayor referente folclórico de nuestro país. Cantautor, poeta y guitarrista, Yupanqui supo reflejar en sus letras y su música, un sentimiento de pertenencia como pocos artistas lograron.

El paisaje norteño que supo ver gran parte de su juventud, fue su principal musa al momento de componer canciones que ya forman parte del repertorio nacional como El Arriero va, El Alazán, Guitarra dímelo tú, entre otras.

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Censurado por sus ideales comunistas durante el gobierno de Juan Domingo Perón, Yupanqui fue encarcelado varias veces hasta que decidió exiliarse en Francia en 1949. Allí fue invitado por la mismísima Edith Piaf para actuar con ella y esto le abrió puertas en Europa, continente por el cual se presentó durante muchos años.

Ya de regreso a Buenos Aires en 1952, Atahualpa comenzó a realizar actuaciones en radios que popularizaron su música. Esto, junto a la validación de otros artistas como Mercedes Sosa, Alberto Cortéz y Jorge Cafrune, hicieron que sus canciones sean muy reconocidas y se conviertan en clásicos de la música popular.

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Ya establecido en su casa de Cerro Colorado, Córdoba, junto a su esposa Nenette, dedicó muchos años a girar por Europa escapando de la dictadura que se estaba instalando en la Argentina. Con el regreso de la democracia obtuvo el premio Konex de brillante como mayor figura de la Historia de la música popular argentina y en 1986 el Gobierno de Francia lo condecoró como Caballero de la Orden de las Artes y las Letras.

En 1992, a dos años de la muerte de su esposa y mientras se encontraba en Francia, Atahualpa falleció un 23 de mayo. Tenía 84 años. Sus restos fueron repatriados y ahora descansan bajo un roble en Cerro Colorado.

Las mejores frases de Atahualpa Yupanqui

  • “La música es una de las cosas que puede salvar al mundo, porque un hombre que busca y encuentra y se solaza horas y días y años y años luz, a través de generaciones, con la belleza, ¿qué otra cosa puede querer que un mundo mejor?”
  • “Cuando se abandona el pago y se empieza a repechar, tira el caballo adelante y el alma tira pa´atrás”.
  • “Soy un cantor de artes olvidadas que camina por el mundo para que nadie olvide lo que es inolvidable: la poesía y la música tradicional de Argentina”.
  • “No le tengo miedo a la muerte, a lo que sí le tengo respeto es al trance, el ir hacia allá. Confieso que tengo curiosidad por saber de qué se trata”.
  • “La guitarra con toda su luz, con todas las penas y los caminos, y las dudas. ¡La guitarra con su llanto y su aurora, hermana de mi sangre y mi desvelo, para siempre!”

jueves, 28 de enero de 2021

Una perdida grandísima para nuestra música Argentina !

Murió el compositor y cantante César Isella

El artista salteño tenía 82 años. Padecía una cardiopatía severa que surgió a raíz de los tratamientos a los que fue sometido en 2012 por una enfermedad.

28/01/2021 | 17:01

  

El músico había estado internado en julio del año pasado en el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).

Isella, nacido en Salta el 20 de octubre de 1938, fue uno de los cantantes y compositores de folclore más respetado de la Argentina y una de las figuras del Movimiento del Nuevo Cancionero.

El salteño, autor de las famosas “Canción con todos” y “Canción de las simples cosas”, fue nombrado en 2012 como Embajador de la Música Popular Latinoamericana.

Isella integró el conjunto Los Fronterizos y compartió una impactante dupla compositiva con Armando Tejada Gómez.

martes, 19 de enero de 2021

#alfredozitarrosa

17/01/2021 ANIVERSARIO

A 32 años de la muerte del cantautor y poeta uruguayo Alfredo Zitarrosa

Fue el creador de emblemáticas canciones como “Guitarra negra”, “El violín de Becho”, “Doña Soledad” y “Milonga de contrapunto”, una composición abiertamente política que grabó hace 50 años.

Zitarrosa, y el compromiso con su tiempo
Zitarrosa, y el compromiso con su tiempo

Este domingo se cumplen 32 años de la muerte del popular compositor, poeta y cantor uruguayo Alfredo Zitarrosa (1936-1989), creador de emblemáticas canciones como “Guitarra negra”, “El violín de Becho”, “Doña Soledad” y “Milonga de contrapunto”, una composición abiertamente política que grabó hace 50 años y que dada su extensa duración ocupó las dos caras de un LP.

“Yo siento que no me miente/la copla cuando se niega/la sangre que no me entrega/la guarda como simiente/pero si el pueblo es torrente/ y si el canto es su sonido/que me explique yo le pido/por qué no hay una canción cantada por un cantor/que no caiga en el olvido”, son algunos de los versos que componen esta obra registrada en 1971 y que finalmente no fue editada porque el sello R&R Gioscia, la principal de Uruguay, se opuso.

Alfredo Iribarne -su verdadero nombre-, nació en Montevideo el 10 de marzo de 1936; a lo largo de sus 52 años de vida se destacó como cantor, poeta, compositor y periodista.

Sus primeros pasos en el mundo del arte los dio en 1954, cuando ofició de locutor en una emisora radial; luego escribió en el semanario Marcha.

Su faceta musical comenzó a aparecer en Perú, en 1964, cuando se presentó en un programa que se emitía por el Canal 13, Panamericana de Televisión.

Ese año comenzó a dedicarse a cantar, desarrollando un estilo propio a partir de su voz grave y envolvente, y desde su gran dominio de la guitarra y el contenido político de sus letras. Se erigió en un referente de la canción en Latinoamérica.

En 1966 participó en el Festival de Cosquín (Córdoba, Argentina) y participó de varios encuentros folclóricos latinoamericanos. “Doña Soledad”, “Pa’l que se va”, “Guitarra negra” y “El violín de Becho” son algunas de sus canciones más reconocidas.

Zitarrosa se convirtió en una de las grandes voces del canto popular latinoamericano, con raíces de izquierda y folclóricas. Adhirió al Frente Amplio de la Izquierda uruguaya, lo que lo llevó el ostracismo y finalmente un doloroso exilio durante los años de la dictadura.

Sus canciones estuvieron prohibidas en Argentina, Chile y Uruguay durante los regímenes dictatoriales que gobernaron esos países. Vivió entonces, sucesivamente, en Argentina, España y México, a partir del 9 de febrero de 1976.

Levantada la prohibición de su música, como la de tantos en la Argentina luego de la Guerra de las Malvinas, se radicó nuevamente en Buenos Aires, donde realizó tres inolvidables recitales en el Estadio Obras Sanitarias en julio de 1983.

Casi un año después volvió a Uruguay, donde tuvo una histórica y multitudinaria recepción el 31 de marzo de 1984, que el cantautor describió como "la experiencia más importante" de su vida.

Zitarrosa murió a los 52 años, el 17 de enero de 1989, a causa de una peritonitis, dejando un enorme legado a la música popular latinoamericana.